Verde no gris

En Moers, en el Bajo Rin, el nuevo edificio administrativo de ENNI Stadt & Service Niederrhein AöR, construido en 2021, es un proyecto emblemático en materia de fachadas verdes. Con una superficie de 600 metros cuadrados, la fachada este es el mayor jardín vertical de Alemania hasta la fecha (mayo de 2022). La vegetación consiste en unas 56.000 plantas sujetas por el sistema de subestructura CROSSFIX®. La fachada verde, con su colorida interacción de más de 30 arbustos con flores y hierbas diferentes, demuestra de forma impresionante el enorme potencial que ofrece este tipo de diseño de fachada, tanto en términos visuales y ecológicos como en otros aspectos positivos para el uso del edificio.
 

Ventajas de una fachada verde

Hay una larga lista de argumentos a favor de las fachadas verdes. Los espacios verdes capturan sustancias nocivas y contribuyen a mejorar el clima de forma sostenible. Sobre todo en las zonas urbanas, en las que no es factible plantar nuevas plantas por falta de espacio, una fachada verde vertical ofrece una opción flexible para construir espacios verdes. En verano, la vegetación vertical proporciona sombra a la fachada, manteniendo el interior agradablemente fresco, mientras que en invierno tiene un efecto aislante, conservando el calor interior. Además, tiene un efecto positivo en el aislamiento acústico. Las plantas absorben el ruido y proporcionan hábitats para pequeños animales e importantes insectos beneficiosos, que escasean en los centros urbanos. La fachada verde no sólo ofrece ventajas desde el punto de vista ecológico. Las posibilidades de diseño flexible de las fachadas son casi infinitas.

Sistema de vegetación mural

Una opción común para crear una fachada verde es utilizar vegetación montada en la pared, también conocida como jardín vertical, que consiste en materiales vegetales individuales. En el ENNI de Moers se utilizó un sistema de este tipo. La ventaja de estos sistemas es que las bolsas de plantas se entregan en la obra ya plantadas, por lo que cumplen inmediatamente los objetivos del diseño. La tecnología de riego y sensores de última generación controlada por aplicaciones garantiza que las plantas reciban los cuidados que necesitan en todo momento. Esta fachada de alta tecnología y valor ecológico requiere una subestructura robusta que satisfaga todos los requisitos en términos de física de construcción, integridad estructural, protección contra incendios y compatibilidad. El sistema de subestructura CROSSFIX® es la elección ideal para la instalación de vegetación montada en la pared. Está fabricado en acero inoxidable, por lo que presenta unos puentes térmicos extremadamente bajos, tiene una gran capacidad de carga, es altamente resistente al fuego y puede utilizarse con la máxima flexibilidad gracias a su geometría única de soportes. Esto permite una amplia gama de opciones de diseño y una adaptación óptima a las condiciones estructurales, como salientes o aberturas en la pared.

Aquí encontrará información detallada sobre el sistema de subestructura CROSSFIX®.